Quemaduras solares y cáncer de piel, ¡protégete!

La relación entre quemaduras de sol y cáncer de piel es posible. Éstas suceden como una reacción de la piel a la radiación ultravioleta (UV) del sol.

Puedes ver la luz del sol y sentir su calor (radiación infrarroja), pero no se puede ver o sentir la radiación UV. Esta radiación puede dañar tu piel incluso en los días nublados y hasta fríos.

En verano, los signos de una quemadura solar pueden comenzar a aparecer en menos de 15 minutos y, dependiendo de la gravedad, puede tardar días o semanas en sanar. La quemadura solar leve se puede tratar en casa, pero las quemaduras graves o las ampollas requieren atención médica inmediata.

Los efectos a largo plazo , de los episodios repetidos de quemaduras de sol ,incluyen arrugas prematuras y un mayor riesgo de cáncer de piel, incluyendo el melanoma .Una vez que se produce daño en la piel, es imposible de revertir. Es por ello que:  ¡la prevención se hace absolutamente necesaria!

Cinco medidas de protección solar para reducir el riesgo de sufrir quemaduras

• Usa la ropa para protegerte del sol (asegúrate de que cubra la mayor parte posible de piel).

• El  SPF (factor de protección solar) de 30 (o superior) de amplio espectro, protector solar resistente al agua. Aplicar 20 minutos antes de salir al aire libre y volver a aplicar cada dos horas.

• Utiliza un sombrero de ala ancha que proteja tu cara, cabeza, cuello y orejas.

• Busca la sombra.

• Ponte gafas de sol , ¡con cristales homologados!

Síntomas de las quemaduras solares, ¿los tienes?

• Cambios en el color de la piel, que van del rosa al rojo púrpura.

•Piel que se nota caliente al tacto.

• Dolor y / o picazón.

• Hinchazón.

• Ampollas llenas de líquido que pueden picar y, finalmente, se rompen.

• Piel aún más delicada cuando las ampollas se rompen.

La piel quemada por el sol cambia de color de dos a seis horas después de haber sido quemada. El cambio de color se seguirá desarrollando hasta setenta y dos horas después.

¡En España te puedes quemar en 15 minutos!

En España,  un día de verano, puedes quemarte con el sol tras 15 minutos de exposición. Además, todos los tipos de quemaduras por el sol, ya sea grave o leve, pueden causar daño permanente e irreversible de la piel. Esto podría sentar las bases para los cánceres de piel se desarrollen. Las quemaduras solares aumentan el riesgo de cáncer de piel. Cada año en España aumentan los casos de melanoma  y cada vez más en personas más jóvenes.

Los varones son más propensos a sufrir quemaduras solares que las mujeres, debido a que pasan más tiempo al aire libre durante las horas punta UV y son menos propensos a usar protector solar.

Radiación UV y quemaduras solares

Los niveles de radiación UV varían dependiendo de la localización, época del año, hora del día, cobertura de las nubes y el medio ambiente. Los niveles de radiación UV no están vinculadas a la temperatura y este tipo de radiación podemos encontrarla dispersa en el aire o reflejada en superficies como edificios, hormigón, arena y nieve. Los tres tipos de radiación UV (basado en la longitud de onda) son UVA, UVB y UVC. La atmósfera terrestre absorbe casi toda la radiación UVC (el tipo más peligroso) antes de llegar al suelo.

Las células de la piel en la capa superior (epidermis) producen un pigmento llamado melanina. A mayor exposición de la piel a la radiación UV mayor producción de melanina. El bronceado es por lo tanto un signo de que la piel ha sido dañada por la radiación UV. Es importante recordar que el bronceado , aún sin quemaduras, todavía puede causar daños en la piel, como envejecimiento prematuro y cáncer de piel. Cada vez que se expone la piel a la radiación ultravioleta del sol o de un solarium aumentan el riesgo de desarrollar cáncer de piel.

Aún así, exponerse de forma moderada al sol es bueno para nuestro cuerpo, ya que la vitamina D se produce a través de una serie de procesos que se inician cuando nuestra piel está expuesta a los rayos UV. En conclusión, tomar el sol sí, pero con protección.

Y recuerda, para las quemaduras solares no existe cura, excepto tiempo y paciencia.

Consejos para tratar quemaduras solares:

• Beber mucha agua. Pasar tiempo en el sol puede conducir a la deshidratación, así como quemaduras de sol.

• Aplicar suavemente compresas frías o calientes, o bañar la zona con agua fría.

• Evitar el uso de jabón, ya que puede irritar la piel.

• Hablar con un farmacéutico acerca de los productos que ayudan a calmar las quemaduras solares. Elige aerosol en lugar de cremas que requieren frotar con la mano.

• No revientes las ampollas. Considera cubrir ampollas que pican con un apósito para heridas para reducir el riesgo de infección.

• Si la piel no le duele en exceso aplicar la crema hidratante o aloe vera. Esto no va a evitar que se “pele”, pero ayudará a aumentar el contenido de humedad de la piel.

• Tomar la medicación de alivio del dolor.

• Mantente alejado del sol hasta que la piel haya sanado completamente. Usa una prenda de color claro(camiseta de algodón) si tienes que salir y que cubra la mayor parte de tu piel.

Descamación de la piel quemada, ¿ahora qué?

No hay ninguna crema o loción que evite que la piel quemada se pele. Esto es parte del proceso de curación natural.

 Cuando la piel empiece a pelarse:

• Resiste la tentación y no toques ni arranques la piel. Deja que la piel muerta se desprenda por sí sola.

• Quita la piel pelada con cuidado una vez se haya desprendido.

• Aplica crema antiséptica para reducir infecciones.

Tratamiento para las quemaduras solares severas:

Consulta a un médico o busca atención del servicio de urgencias del hospital más cercano si experimentas:

• Quemaduras graves con ampollas extensas y dolor.

• Quemadura de sol sobre un área grande de la piel.

• Dolor de cabeza.

• Náuseas y vómitos.

• Fiebre.

• Mareos.

Sugerencias para evitar las quemaduras, ¡más vale prevenir qué curar!

• El bronceado, cuando ya se tiene, ofrece un pequeño nivel de protección de las quemaduras de sol (SPF alrededor 3), pero no protege totalmente la piel, tampoco lo hace contra el riesgo de cáncer de piel.

• ¡No asumas que el sol es seguro cuando llevas protección!

• Dentro del agua también puedes quemarte, ¡en la playa o piscina!

• Si sales a la calle o prácticas deporte al aire libre, protégete.Las actividades de invierno, como el esquí y el snowboard representan un alto riesgo de quemaduras solares, ya que la radiación UV es ya mayor en las regiones alpinas que a nivel del mar.

• Los bebés menores de 12 meses no deben ser expuestos a los rayos UV directamente y deben ser protegidos correctamente del sol. Trata de mantener a los bebés y los niños a la sombra y utilizar ropa que cubra la mayor parte de su cuerpo. Utiliza pequeñas cantidades de protector solar para niños en zonas descubiertas como la cara y las manos.

Ahora que sabes cómo proteger tu piel no pierdas más tiempo, ¡cuídala!