Corrección quirúrgica del linfedema
El linfedema es uno de los problemas más complejos a tratar dentro del campo de la Cirugía Reconstructiva y la Microcirugía.
De los primeros pasos a la resolución definitiva
Entrevista al Dr. Juan José Aparicio, Director Médico de SILFID’, la Unidad de Cirugía Reconstructiva y Estética de la Clínica Vistahermosa. Cirujano Plástico especialista en Cirugía Reconstructiva Compleja y Microcirugía y Linfedema.
– Últimamente se ha hablado mucho del linfedema en los medios de comunicación, así como en recientes artículos publicados por la SECPRE, ¿puede explicarnos de qué se trata?
El Linfedema es un problema crónico y progresivo en donde por alguna razón fracasa el sistema de drenaje de linfa de las extremidades, el tronco y la zona genital o la cara. Con ello se desarrolla un aumento masivo del peso, volumen y densidad de las extremidades y/o tronco, así como un deterioro imparable de la movilidad de las mismas.
Es lo que antaño se llamaba Elefantiasis, por la apariencia de la piel de la zona afecta que simula la piel de elefante.
Se trata de una enfermedad de evolución constante e imparable que llega a incapacitar a los pacientes deteriorando gravemente su calidad de vida, capacidad laboral y social, así como les predispone al desarrollo de procesos infecciosos (celulitis de repetición) y por consiguiente a ingresos hospitalarios constantes y graves.
– ¿Por qué se causa?
En el mundo occidental, se produce habitualmente como consecuencia de las cirugías y tratamientos de radioterapia en casos de cáncer de mama, ovario, recto etc. En estas situaciones ya sea por las cirugías que se deben realizar para tratar el cáncer, como por la quemadura que la radioterapia produce en los tejidos, el sistema de drenaje de la linfa se pierde.
Del mismo modo, las vías de drenaje (canalículos linfáticos) se obstruyen y todo esto favorece el desarrollo de fibrosis en las extremidades o las zonas afectadas.
En España, se calcula que un tercio de las mujeres mastectomizadas por cáncer de mama presentan este problema, por lo que puedes hacerte una idea del volumen de pacientes que tratamos sólo por esta causa. Si a esto le añadimos los pacientes operados y radiados por cáncer de ovario, útero, recto eco, te darás cuenta que pese a ser un problema frecuente, pasa más desapercibido porque hasta ahora no había muchos tratamientos eficientes para solucionarlo y los pacientes debían aceptar esta condición tras la cirugía oncológica, como inevitable – intratable.
– ¿Qué tratamientos existían para este problema? ¿Eran efectivos?
Desde siempre, el Linfedema se ha tratado con rehabilitación, drenajes linfáticos y sistemas de contención (mangas de compresión, preso terapias etc). En los últimos años la cirugía reparadora (microcirugía y supra-microcirugía) ha venido desarrollando dos tipos de técnicas en donde se restituye el daño del sistema linfático o se sustituye el mismo, al transplantar ganglios y canalículos linfáticos desde zonas donde se pueden tomar sin lesionar, a las zonas donde hacen falta.
Lamentablemente ambos tipos de tratamiento, aunque conseguían mejorar la enfermedad y en muchos casos frenarla presentan resultados muy variables e impredecibles dado que no conseguían una resolución definitiva de la causa de la enfermedad.
– Ha presentado recientemente, en el Congreso de Cirugía Plástica de la Comunidad Valenciana, una nueva técnica capaz de corregir el linfedema de forma definitiva; técnica que lleva aplicando desde hace años, junto a su grupo, en pacientes con este problema, ¿en qué consiste?
Durante los últimos años hemos venido innovando y desarrollando una nueva técnica que es el fruto de múltiples modificaciones, ensayos y evoluciones técnicas de transferencia linfática previamente descritos y estudiados.
Con esta nueva técnica quirúrgica sustituimos el tejido linfático dañado, así como los canalículos linfáticos y sistemas de drenaje.
Liberamos todo el tejido fibrótico y cicatricial de la extremidad e implantamos una verdadera bomba de achique en el miembro que literalmente extrae la linfa de los tejidos y la devuelve a la circulación.
Esto se consigue no sólo frenar la evolución de la enfermedad (que de otro modo es imparable) sino también revertirla, por lo que estas pacientes vuelven a recuperar la movilidad normal del brazo o pierna afectadas, disminuyen el volumen y peso de la misma y sobre todo dejan de presentar las infecciones repetitivas y los cambios elefantiásicos de la piel que normalmente desarrollarían.
– ¿Pueden llegar a curarse estas pacientes con las cirugías que realiza?
Así es, con estas cirugías se puede llegar a la cura de esta enfermedad. Sin embargo, no podemos llegar a revertir totalmente el daño que ya se haya producido en la misma, por lo que aunque la mejoría tras esta intervención es evidente y notoria, no es perfecta.
Es por esta razón que desde nuestra Unidad venimos trabajando de forma conjunta y multidisciplinar con los Servicios de Rehabilitación, Cirugía General y Ginecología de la Clínica Vistahermosa, para dar un tratamiento integral a las pacientes buscando tratar y sobre todo evitar esta difícil situación. Así pues, podemos en este momento no sólo tratar a las pacientes con Linfedema ya desarrollado y severo (grados III y IV) sino también evitar su aparición y dar un tratamiento quirúrgico temprano eficiente (grados I y II).
– Una paciente con un cuadro de Linfedema severo, ¿cómo puede ser valorada y tratada por su unidad?
Acercándose a nuestra consulta en el edificio V76 de la Clínica Vistahermosa o solicitando una cita por teléfono al 652528650. En esta primera visita valoramos la situación de las pacientes así como sus necesidad de rehabilitación, fisioterapia y cirugía.
Gracias a los nuevos avances en esta área, esta patología ya puede ser tratada de forma eficiente, predecible y segura.
Artículo publicado en el nº 48 de Más Que Salud, puedes consultarlo en el siguiente enlace.