Cuidados durante la baja laboral por prótesis de rodilla
Los cuidados durante el tiempo de baja laboral por prótesis de rodilla son esenciales para la recuperación del paciente. En general, son operaciones seguras y que consiguen unos resultados óptimos. Sin embargo, si el paciente no se cuida bien, la intervención puede fracasar. Si estás pasando por este proceso, te invitamos a seguir los consejos que verás a continuación.
¿Qué cuidados durante el tiempo de baja laboral por prótesis de rodilla debes tener en cuenta?
Debes seguir todas las recomendaciones de tu médico acerca de los cuidados durante el tiempo de baja laboral por prótesis de rodilla para una buena recuperación. Es necesario que tengas una serie de precauciones para que todo salga bien.
La recuperación puede alargarse más de un año, que es cuando a buen seguro volverás a tener tanto la movilidad como la fuerza muscular previas a tener problemas en la zona.
Estos son los cuidados básicos que debes poner en práctica en tu hogar:
- Toma la medicación pautada por tu médico.
- Realiza los ejercicios de recuperación de la forma y las veces que te haya indicado el equipo médico.
- Coloca hielo en la rodilla, de forma indirecta, después de realizar los ejercicios.
- Si así te lo ha recomendado tu médico, utiliza medias de compresión en la zona.
- Mantén la pierna elevada el máximo tiempo posible cada día.
- Lava la herida dos veces al día, después, aplica crema hidratante en la zona con suavidad.
- Usa zapatos cómodos y que sujeten bien el pie.
- Siéntate en asientos que cuenten con reposabrazos firmes.
- Cambia la posición de la pierna que ha sido intervenida cuando estés sentado, flexionando y estirando.
- Lleva una dieta sana, variada y equilibrada que facilite que no cojas peso.
- Cuando estés tumbado, no coloques nada debajo de tu rodilla.
¿Qué otros cuidados durante el tiempo de baja laboral por prótesis de rodilla debes poner en práctica?
Además de todo lo comentado hasta ahora, es importante que tu vivienda esté acondicionada para tu recuperación. Retira cualquier objeto que pueda hacerte tropezar y coloca los muebles de forma que faciliten tus movimientos.
Es importante que camines de manera apropiada. Lo habitual es que lo hagas con muletas. Una opción es mover hacia adelante primero una muleta y después la otra. Haz lo mismo con la pierna intervenida y por último mueve la sana. Otra manera de hacerlo es desplazar al mismo tiempo la pierna operada y la muleta contraria, luego la otra pierna y la otra muleta.
Al sentarte, sitúa tus manos en los reposabrazos y adelanta el pie de la pierna afectada. Después, siéntate despacio. Cuando tengas que levantarte, haz lo mismo pero incorporándote.
Intenta evitar las escaleras, si no puedes hacerlo, sitúa las muletas en el escalón de arriba, después la pierna sana y por último la operada. Para bajar, coloca las muletas en el peldaño inferior, baja la pierna operada y luego la sana.
Pon en práctica todos estos cuidados durante el tiempo de baja laboral por prótesis de rodilla y tu recuperación será mejor.