La Dieta Mediterránea ayuda a prevenir enfermedades autoinmunes y alérgicas

Se sabe que la mejor medicina para el organismo es la preventiva, y no hay mejor forma de prevenir patologías que mediante un estilo de vida saludable, que combine una dieta equilibrada con el ejercicio. 

Si hablamos de hábitos de vida saludable es inevitable pensar en la Dieta Mediterránea, considerada una de las más saludables del mundo, y no son razón.

Debido a sus sus características y beneficios ha sido declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Pero, ¿sabemos cómo influye la alimentación en nuestra salud general? ¿Es la Dieta Mediterránea la clave?

Recientemente entrevistamos al Dr. Vicente Navarro, investigador principal del Grupo MiBioPath y Director de Investigación del Instituto de Investigación Bioithas en el Parque Científico de Alicante. Le preguntamos acerca de la microbiota y su papel en las enfermedades de la piel. Durante la entrevista conocimos las diferencias entre prebiótico, probiótico y postbiótico, además de otras interesantes líneas de investigación donde se están aplicando los probióticos, como por ejemplo: las migrañas, el acné o la cosmética.

En esta ocasión le preguntamos por la alimentación, ¿es posible mejorar nuestra salud a través de la microbiota? Además, hemos querido saber su opinión sobre la Dieta Mediterránea.

Esto es lo que nos ha contado el Dr. Vicente Navarro.

-Dr. Navarro, ¿puede explicarnos de qué forma influye nuestra alimentación en la microbiota?

Dos de los factores que más influyen sobre la microbiota intestinal son la dieta y la edad. La segunda es imposible de controlar, pero sí podemos actuar sobre la dieta y tratar con ello de modular la microbiota.

En los países civilizados, donde predomina el consumo de carnes, se sabe que es más prevalente el enterotipo tipo 1 , en el que hay un predominio de bacteroides en las heces. Mientras que en poblaciones con alto consumo de fruta y verdura aumenta el número de casos con enterotipo 2, en el que es mayoritaria la presencia del germen prevotella.

Se sabe que las diversidad bacteriana intestinal es menor en países desarrollados que en poblaciones que viven como lo hacían miles de años, como por ejemplo poblaciones indígenas del amazonas y otras áreas no desarrolladas. A nivel de salud esto tiene unas consecuencias, y es que las enfermedades autoinmunes y alérgicas son mucho más prevalentes en países desarrollados con un denominador común: una dieta de comida procesada, lo que conocemos actualmente como comida rápida y poco saludable.

Quizá este es el motivo por el que en aquellas zonas donde se sigue una dieta mediterránea, evitando las comidas procesadas, estas patologías son menos prevalentes.

Otro factor que junto a la dieta influye en mayor medida sobre la microbiota es la edad. Se sabe que con el paso de los años la diversidad de bacterias que tenemos en el tracto intestinal es menor (es decir, aún teniendo el mismo número de bacterias hay menos bacterias diferentes entre sí) y que predominan en esos años de vida los microorganismos anaerobios. El motivo por el que esto ocurre no lo conocemos, pero la consecuencia es un mayor número de enfermedades en edades avanzadas que en los años previos.

Si esta alteración de la microbiota es causa de enfermedad o consecuencia de la misma, es algo que tendremos que esperar a conocer,  hasta que tengamos investigaciones cada vez más numerosas dirigidas a estudiar el efecto de la microbiota sobre la salud y la enfermedad.

-En este caso, ¿qué papel juegan los probióticos?

En un futuro próximo, vista a cuatro o cinco años, van a empezar a aparecer lo que son alimentos funcionales enriquecidos con probióticos dirigidos a la prevención de enfermedades. Si somos capaces de mantener una microbiota intestinal joven durante más años, sin lugar a dudas vamos a retrasar o disminuir la prevalencia de enfermedades que son características de la senectud.

-¿Puede explicarnos más a fondo en qué consisten los alimentos funcionales?

Son alimentos modificados, a los que se ha añadido o eliminado uno o varios ingredientes para beneficiar a nuestro organismo. Uno de esos alimentos que se pueden usar para complementarlos son los probióticos, dirigidos a prevenir la aparición de alguna enfermedad alérgica o autoinmune o incluso a ayudar en su curación, una vez se ha desarrollado.

-Siguiendo con los alimentos, a día de hoy, ¿cuáles deben estar presentes en nuestra dieta?

Lo más recomendable es mantener una dieta variada y  equilibrada. Cuantos menos químicos y aditivos contengan los alimentos mejor. Precisamente para favorecer a nuestro organismo es preferible comprar productos frescos en el mercado.

No es lo mismo , por ejemplo, una cebolla comprada en grandes superficies, que ha sido tratada previamente, que una recolectada y vendida sin tratamiento previo. ¿Cuánto tiempo hace que no vemos brotes en un producto de un centro comercial? Si echamos la vista atrás esto era algo muy típico en productos que comprábamos en mercados populares.

No cabe duda de que los alimentos cuanto más naturales (bio) sean mejor para nuestra salud.

El problema es que con los métodos de cultivo no procesados la producción es menor, y a nivel global no tendríamos comida para alimentar a toda la población de la tierra. De ahí que los alimentos tratados, manipulados incluso genéticamente para muchas partes del mundo, serían un mal menor para combatir la hambruna. Un ejemplo claro son los alimentos procesados que se emplean en animales de granja , haciendo que estos engorden mucho más rápido y en menos tiempo, haciendo más eficiente el proceso de cría que finalmente acaba en la cadena alimentaria del ser humano.

Muchos de los cereales que tomamos en la actualidad han sufrido la manipulación de sus semillas para aumentar su producción y con ello muchas de las alergias alimentarias que conocemos son más prevalentes que años atrás. No se puede recomendar una alimentación concreta, pero sí intentar seguir una dieta equilibrada lo más parecida a los alimentos bio que toda la vida hemos tomado o tomaron nuestros antepasados. Es terrible darse cuenta de que el perro, el animal que más comparte la dieta humana, y que ha sido animal de compañía en los últimos 2000 años, al haber sido alimentado con las sobras de nuestra comida termina sufriendo cada vez más enfermedades alérgicas, dermatitis y diarreas, al igual que está sucediéndonos a los humanos.

-Para finalizar, si hablamos de dieta y tuviera que elegir una…

Probablemente la Dieta Mediterránea. Hasta ahora se ha demostrado que es una de las más saludables del mundo, por lo que vamos a pensar que está influyendo de manera positiva sobre esa microbiota. Mi consejo es que la mantengamos.

El concepto Dieta Mediterránea ha significado toda la vida producto natural y dieta muy variada. Probablemente somos el país donde existe una mayor diversidad de frutas, verduras, hortalizas y mejores carnes y pescados alimentados de manera natural disponible.

Hay que seguir cuidando y practicando esta dieta que tantos años de salud nos ha dado a la población mediterránea, y en concreto a la población española. Son conocidos los beneficios del aceite de oliva, de los ácidos grasos omega 3 y 6 del pescado y algunas frutas, e incluso los efectos beneficiosos del vino por la uva y sus componentes.

Uva monastrell

Un dato curiosos, es que actualmente en muchas universidades de todo el mundo están estudiando la uva monastrell, típica de la zona mediterránea, en concreto de la Comunidad Valenciana y sur de Castilla la Mancha.

Al parecer, ésta tiene un mayor efecto protector frente a eventos cardiovasculares y cánceres en comparación con otros tipos de uva , debido a sus altos contenidos en ácidos fenólicos, flavonoides y resveratrol, que poseen una gran capacidad de proteger a las lipoproteínas LDL de la oxidación.

Por lo tanto, consumamos productos mediterráneos, pues estos nos ayudarán a estar más sanos.

Muchas gracias Dr. Navarro por su tiempo, siempre un verdadero placer hablar con usted, ¡aprendemos muchísimo!