Duelo por mascotas
Quizá uno de los duelos más incomprendidos sea el duelo de mascotas.
Es frecuente que alguien que ha tenido un animal de compañía durante muchos años se muestre triste, incluso desamparado, cuando este fallece. Para muchas personas se trata de un duelo extraño e inexplicable ya que tienen la percepción de que “solo era un animal”. Por ello, en este artículo se va a intentar arrojar un poco más de luz sobre este tipo de duelo. ¡Comencemos!
¿Qué es el duelo?
Antes de comenzar de lleno con el duelo de mascotas, es importante remarcar qué es exactamente un duelo. Como indican Meza et al. (2008) en su artículo El proceso del duelo. Un mecanismo humano para el manejo de las pérdidas emocionales el duelo “es la reacción natural ante la pérdida de una persona, objeto o evento significativo”. Y añaden que “incluye componentes psicológicos, físicos y sociales, con una intensidad y duración proporcionales a la dimensión y significado de la pérdida”.
En la descripción podemos observar que el duelo consiste en la reacción que sufrimos de forma natural ante una pérdida que depende la dimensión y significado que le demos a esa pérdida. Este dato es importante para comenzar a entender el duelo de mascotas. Como se irá viendo a lo largo de todo el artículo, las mascotas -sobre todo los perros y los gatos – pueden convertirse en una parte muy destacada de nuestras vidas hasta el punto de convertirse en uno más de la familia. Debido a que este punto es el que puede generar más controversia a la hora de no entender este tipo de duelo, vamos a profundizar en el vínculo con nuestra mascota.
La importancia del vínculo
Para entender el duelo de mascotas, es importante comprender el vínculo que se establece con ellas. Este aspecto cobra especial relevancia porque al tratarse de un duelo bastante incomprendido, la persona que lo sufre puede dejar de expresar su dolor por vergüenza a ser juzgada. Y, de esta forma, el sufrimiento de la persona que atraviesa el duelo puede verse alargado y agravado.
Como destaca el equipo de Cartolin et al. (2020), los animales de compañía pueden producir efectos positivos para la salud y el bienestar de las personas. Afirman que “permiten el desarrollo psicológico y emocional, a través del fortalecimiento de valores como el amor, la fidelidad, la alegría, la disciplina y la responsabilidad”. Así pues, se observa que un animal de compañía puede suponer un aspecto muy importante en nuestras vidas ya que se crea un fuerte vínculo emocional y psicológico.
Duelo de mascotas
Aquí llegamos al punto clave. La incomprensión de este tipo de duelos. Mucha gente de nuestro entorno puede ver nuestra mascota solo como un animal, por lo que puede producir la sensación de “objeto”, es decir, les despoja de muchas de sus cualidades que intercambian con los seres humanos. En este punto, es clave añadir que este tipo de mascotas viven muchos momentos con nosotros, buenos y malos. Esto es, no se trata solo de un animal que esté en casa, sino que compartimos experiencias, llegando a ser un miembro de nuestra familia.
De entre aquellos que han tenido animales de compañía, ¿quién no ha jugado con él? ¿quién no ha paseado con él? ¿quién no se ha sentido acompañado por su mascota en momentos de soledad? Poco a poco, la mascota pasa a ser parte de nuestra vida. Obviamente depende del tipo de mascota, con algunas se pueden interaccionar más que con otras, sin embargo, el vínculo afectivo que establezcamos con nuestro animal es lo que puede determinar el dolor que sentimos cuando fallece. Aun así, los duelos más duros en animales suelen ser cuando se trata de perros, ya que para muchas personas este tipo de animal representa un amor incondicional.
Síntomas del duelo
Los síntomas durante el duelo pueden ser varios y dependerán mucho de cada persona. A nivel general, se experimentará tristeza y dolor por la pérdida. Posiblemente rememoremos una y otra vez las circunstancias de la muerte y en caso de haber sido un accidente podemos llegar a obsesionarnos en cómo se podría haber evitado. La ansiedad también es un síntoma que podemos experimentar, incluso llegar a estar más irritables. Debido a estos síntomas, también es frecuente presentar dificultades en la concentración.
Algunas personas pueden llegar a presentar alucinaciones visuales (ver a la mascota) o auditivas (escucharla). El comportamiento de búsqueda también puede representar un síntoma y, aunque la persona sepa que su mascota ha fallecido, lo busca de forma casi inconsciente. Otro síntoma pueden ser las pesadillas en torno a la mascota fallecida. Añadir también que es posible presentar lagunas mentales y dificultad para recordar momentos junto a nuestras mascotas.
¿Cómo llevar el duelo de un animal de compañía?
Para sobrellevar de la mejor forma posible el duelo por la pérdida de nuestro amigo, podemos seguir una serie de pautas.
Reconocer que la muerte es una realidad
La muerte es una realidad que nos rodea y que, sin embargo, tendemos a negar. Cuando llega el fallecimiento de nuestra mascota es importante reconocer esta realidad, algo que podría durar semanas o meses. Es importante ser amables y cariñosos con nosotros mismos y, poco a poco, asumir que la muerte forma parte de la vida.
Observar y aceptar los sentimientos
Las pérdidas producen dolor, pero reprimir o ignorar ese dolor es una solución poco -o nada- eficaz. Por eso es necesario experimentar esa tristeza. Se trata de un momento duro y complicado, pero es importante. En este punto, cabe destacar que la tristeza es una emoción adaptativa que nos ayuda en los momentos de transición hacia una nueva realidad sin nuestra mascota. Así pues, lo mejor que podemos hacer es tomarnos nuestro tiempo para trabajar con nuestras emociones y sentimientos.
El recuerdo
Trabajar con el recuerdo de nuestra mascota puede ser doloroso pero útil. Por ello, podemos mirar fotografías de nuestra mascota, escribirle una carta en la que recordemos el tiempo que pasamos juntos o incluso un pequeño tributo.
Recibir apoyo de los demás
El apoyo de los demás es un factor importante. Al ser un duelo tan incomprendido podemos llegar a sentirnos muy solos en nuestro sufrimiento y, de esta forma, se agrava más el dolor. Por ello, es recomendable buscar apoyo en otras personas que hayan pasado por el mismo proceso, ya que nos comprenderán mejor.
Conclusión
El duelo de mascotas es un tema complejo. Más que por el duelo en sí, por la falta de comprensión que puede llegar a levantar. Es por esto un factor relevante el hecho de vivir nuestro propio duelo sin darle importancia a comentarios externos: “era solo un animal”, “eres un exagerado”. El duelo es algo interno y personal. Cada uno tenemos nuestros ritmos. Así pues, si durante unas semanas o meses sentimos el dolor de la pérdida, no hay razón para asustarse, es normal. Además, estos sentimientos suelen ser compartidos por la mayoría de las personas que han sufrido una pérdida de este tipo.
Cribeca Sevilla @cribeccapsicologia
Bibliografía
Cartolin, X., Herrera, P., León, D. y Falcón, N. (2020). Impacto emocional asociado a la pérdida o fallecimiento de un animal de compañía. Revista de Investigaciones Veterinarias del Perú, 31 (2).
Meza, E.G., García, S., Torres, A., Castillo, L., Sauri, S y Martínez, B. (2008). El proceso de duelo. Un mecanismo humano para el manejo de las pérdidas emocionales. Revista de Especialidades Médico-Quirúrgicas, 13 (1), 28-31.
Texto redactado por Cribecca Psicología www.cribecca.es