Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) : señales de alarma
Como explican Mª Carmen Soliveres y Teresa Pereira, psicólogas y codirectoras de PsicoActúa, Unidad de Psicología y Medicina de la Salud del Hospital Vithas Medimar, los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) se caracterizan por un comportamiento patológico frente a la ingesta alimentaria y una obsesión por el control del peso, provocando consecuencias negativas tanto para la salud física como mental.
Los Trastornos de la Conducta Alimentaria con mayor prevalencia son la anorexia nerviosa y la bulimia nerviosa, pero también existen otros como la anorexia purgativa, el trastorno por atracón o la vigorexia.
Los últimos datos recabados indican que alrededor de 400.000 personas padecen en España algún TCA, siendo la tercera causa de enfermedad crónica en la adolescencia. La edad promedio de inicio del trastorno es de 12 a 18 años, siendo la población femenina más vulnerable; según datos de la Fundación Fita y de la Asociación española para el estudio de estos trastornos recogidos por la agencia Efe.
Señales de un TCA
Algo a destacar de estos trastornos es la falta de conciencia de la enfermedad, tanto por parte de la persona afectada como por parte de su entorno.
El papel de la familia es especialmente importante para detectar a tiempo los comportamientos que pueden estar relacionados con la existencia de un Trastorno de la Conducta Alimentaria. Algunas de las señales más comunes son:
- Recurrir continua e injustificadamente a dietas restrictivas
- Preocupación exagerada por la comida, las recetas o las calorías que se ingiere
- Comportamientos alimentarios extraños (velocidad de la ingesta, cortar en trozos muy pequeños la comida, etc.)
- Ir al baño después de cada comida, aumentando la frecuencia y la cantidad del tiempo
- Evitar comer en público
- Rapidez con la que se acaba la comida en casa
- Pérdida de peso injustificada
- Práctica de ejercicio físico de forma desmesurada
- Consumo de laxantes y diuréticos
- Amenorrea (pérdida del ciclo menstrual durante, al menos, 3 meses)
- Aislamiento progresivo
- Aparición de síntomas de depresión o ansiedad
Si se detecta alguna señal, se debe consultar al especialista, psicólogo o psiquiatra, inmediatamente, ya que cuanto antes se detecte el problema y se inicie el tratamiento oportuno, más fácil será salir de él y evitar futuras complicaciones.