Trucos para ver el eclipse solar sin peligro, ¡protege tus ojos!
Los expertos advierten del peligro para los ojos del eclipse solar y dan recomendaciones para disfrutarlo sin dañar nuestra salud ocular.
Si no se toman las precauciones necesarias, un eclipse de sol puede poner en riesgo la vista del observador, produciendo incluso quemaduras en la retina y ceguera permanente. Como regla general, nunca debemos mirar al sol directamente.
“No mirar jamás directamente al Sol”. Esa es, en resumen, la principal medida preventiva que hay que seguir cuando se produce un eclipse como el que tendrá lugar mañana, día 20 de marzo, coincidiendo con el equinoccio que da inicio a la primavera, y que se verá en nuestro país entre las 09:00h y las 11:30h, aproximadamente.
“Un eclipse es un fenómeno natural interesante que puede poner en riesgo la vista del observador si no toma los cuidados necesarios”, explican Paloma Luque y Esther López, del Departamento de Optometría Clínica de Innova Ocular IOA Madrid -perteneciente a la red de clínicas de Microcirugía Ocular de mayor prestigio y tradición de España, Innova Ocular-, en el blog de este centro, asegurando que “observar el Sol directamente puede producir quemaduras en la retina y ceguera permanente”.
Y es que, tal y como Luque y López explican en este post, “como regla general, nunca debemos mirar al Sol directamente, ni con gafas de sol, ni con filtros solares que no estén destinados para ello” porque, al estar el astro oculto, es menos molesto mirarlo directamente e incluso mantener la mirada varios minutos; sin embargo, “la radiación ultravioleta está causando daños irreparables en nuestra retina que notaremos al rato, cuando ya no tengan solución”.
Así, para las optometristas, las medidas de obligado cumplimiento en toda observación solar incluyen no mirar jamás directamente al Sol, ni “a través de gafas oscuras, películas veladas, radiografías o cristales ahumados con una vela; ni a través de lentes, lupas, oculares, gemelos, prismáticos, telescopios ni demás aparatos de ampliación de imágenes; ni utilizando el visor de las cámaras fotográficas, ni siquiera cuando ésta sea del tipo réflex, salvo que se disponga de un filtro adecuado, y nunca más de un minuto seguido”.
Trucos caseros para ver el eclipse
Técnicas para disfrutar del eclipse sin peligro para nuestros ojos Podemos hacerlo, eso sí, utilizando los filtros homologados por la Comunidad Europea o las llamadas “gafas de eclipse”, que en todos los casos tienen un índice mínimo de opacidad de 5, “y siguiendo al pie de la letra las instrucciones de uso”, insisten Luque y López.
También hay otras formas de ver el eclipse sin dañar nuestros ojos, como “utilizar durante unos segundos como filtro solar el cristal oscuro de soldador número 14 que se puede comprar en ferreterías, o bien hacer una observación indirecta”, señala el post, indicando varias técnicas “aceptadas” para hacerlo.
Una de las mejores, a criterio de las optometristas de Innova Ocular IOA Madrid, es utilizar un telescopio, haciendo pasar la luz del Sol a través de éste y proyectándola sobre una superficie lisa. Para la aplicación de esta técnica, que permite observar algunos detalles de la superficie solar, “se recomienda utilizar los lentes de menor aumento, ya que producen imágenes más grandes y generan menos calor, protegiendo así el instrumento”, indican.
Asimismo, haciéndonos con unos binoculares, podemos tapar uno de los lentes y hacer pasar la luz a través del otro, pero -insisten de nuevo- “nunca se debe mirar al Sol directamente” tampoco a través de este instrumento, ya que “puede producir quemaduras graves e instantáneas en la retina”.
Por último, otro método “casero” para ver el eclipse sin peligro para nuestra salud ocular es perforar un agujero diminuto con la ayuda de un alfiler en una hoja de cartón y hacer pasar la luz solar a través de éste, proyectándola sobre un papel u otra superficie lisa.
Especial atención hay que tener tanto con los niños, ya que su retina es más sensible y, además, es más difícil controlar e impedir que miren directamente al Sol, como con el consumo de alcohol o drogas que, al conllevar una dilatación de las pupilas, puede aumentar el grado de daño visual ocasionado.
Eclipse total para celebrar el inicio de la primavera
Los eclipses, fenómenos que se producen cuando la Luna oculta al Sol desde la perspectiva de La Tierra -lo que sólo puede pasar durante la Luna Nueva (Sol y Luna en conjunción)- pueden ser parciales, cuando la Luna no cubre por completo el disco solar, que aparece como un creciente; semiparciales, cuando la Luna casi cubre por completo el Sol, pero no del todo; o totales, cuando, desde una franja (banda de totalidad) en la superficie de La Tierra, la Luna cubre totalmente el Sol pero fuera de ella el eclipse es parcial.
El eclipse de mañana será total, coincidirá con el equinoccio de primavera, es decir, con el inicio de la nueva estación, y su mayor duración en situación de totalidad será 2 minutos y 47 segundos frente a la costa de las Islas Feroe (Dinamarca), aseguran Luque y López. Desde toda Europa, en mayor o menor grado, dependiendo de la latitud, también podrá verse, llegando a ser prácticamente total en Islandia y Escandinavia y completamente total en el Polo Norte.
Según el post de Innova Ocular IOA Madrid, en España el eclipse comenzará a las 09:05h, alcanzará el máximo apogeo a las 10:08 horas y terminará a las 11:20 horas, pudiendo verse el 76% de la superficie solar oscurecida desde La Coruña, el 67% desde Madrid y el 46% desde las Islas Canarias.
Como curiosidad, las optometristas animan a observar durante el punto de máxima ocultación tanto a los animales, muy sensibles a este fenómeno, y que en su mayoría guarda silencio en ese momento o reacciona con nerviosismo, como las sombras de los objetos, que se alteran de forma perceptible.
Finalmente, dado lo inusual y apasionante del fenómeno que tendrá lugar mañana, y siempre que tomemos todas las precauciones necesarias para proteger nuestros ojos del peligro que implica para ellos, podemos quedarnos con un bonito recuerdo del eclipse fotografiándolo con cualquier cámara de control manual, especialmente las del tipo S.L.R. (conocidas como réflex), y utilizando preferiblemente objetivos de distancia focal larga, de manera que se pueda impresionar el Sol al mayor tamaño posible, concluye Luque.